NEPOTISMO EN LA POLICÍA
CHETUMAL
Malestar e inconformidad causó entre los elementos de la Policía Estatal Preventiva el reciente nombramiento de Guadalupe Yajaira López Hernández como directora general de Planeación de la Secretaría de Seguridad Pública; ello, porque estaría incurriendo en nepotismo, al mantener a un hermano en la nómina de la Policía Estatal Preventiva, además de ser consanguínea del exboxeador Rodrigo “La Avispa” López, acusado en múltiples ocasiones de narcomenudeo y otros actos delictivos.
Yajaira López Hernández se desempeñaba como jefa de inventarios en la Policía Estatal Preventiva (PEP), hasta que fue designada, en marzo de este año, como directora administrativa, sustituyendo en el cargo a José Rangel Osorio, después de que este solicitara su prejubilación por 30 años de servicio. Desde ese momento, empezó a surgir la polémica, ya que en las áreas administrativas empezaron a ser colocados varios incondicionales de la nueva funcionaria.
Las inconformidades se agravaron, sin embargo, desde el 26 de septiembre, cuando el actual secretario de Seguridad Pública, Rodolfo del Ángel Campos, presentó a esta nueva funcionaria como directora general de Planeación, en lugar de Pedro Fernando Pizón Sosa.
Estos y otros movimientos que se han realizado, han generado malestar e inconformidad entre elementos policiacos y personal administrativo que se está viendo desplazado, como es el caso de la supuesta designación de Roberto López Hernández en el área administrativa de la Dirección del Centro de Internamiento Para Adolescentes (CIPA) en Chetumal, situación que sigue generando más polémica en las diversas áreas de la SESP.
A través de redes sociales, se acusa a esta funcionaria de nepotismo, pues se está encargando de poner en lugares estratégicos a familiares y amigos, esto sin dejar de mencionar la aparente protección que le brinda a su también hermano, “La Avispa” López, quien cuenta con dos taxis y que se ha visto involucrado en varias acusaciones de delincuencia organizada, en Calderitas y Chetumal.
SU HERMANO, UNA ‘FICHA’
Rodrigo López Hernández, hermano de la nueva directora general, es una figura conocida en el sur de la entidad, por los conflictos que ha protagonizado al interior del Sindicato Único de Choferes de Automóviles de Alquiler (Suchaa), como por sus escandalosos nexos con la delincuencia.
Quien fuera boxeador profesional, en 2006 perdió toda oportunidad para pelear por un campeonato internacional, después de que se viera involucrado en una riña y balacera en el bar denominado “Leos” de esta ciudad, donde perdió la oreja del lado izquierdo, al enfrentarse con un militar. Por estos hechos se inició la averiguación previa CHE-249/2006.
Mucho más grave fue el hallazgo en su domicilio en Calderitas, en 2010, de nueve ladrillos de marihuana, con peso de nueve kilos, además de una báscula, una libreta con registro de ventas y una bolsa con paquetes de lo que parecía ser cocaína.
Lo anterior fue producto de un operativo militar, guiados por información obtenida tras la detención de la célebre “narcoabuela”, María de Jesús Gómez Navarro, en posesión de 859 mil pesos en efectivo. La pista resultó buena, pues además de la droga, en la casa de “La Avispa” se encontró una credencial de la hija de la “narcoabuela”, Sandra Gómez Cruz, a quien vecinos señalaban como visita frecuente a este domicilio.
Esta mujer sería detenida dos años después, por parte de la Policía Militar. La mujer circulaba en un vehículo en compañía de su hermano, Horacio Gómez Cruz, y 30 kilogramos de marihuana, 26 envoltorios de crack y 21 mil pesos.
Aunque “La Avispa” era señalado como parte de esta célula de narcomenudeo, realizado supuestamente a través de sus dos taxis, nunca fue detenido por estos delitos.
Con su hermana ahora encumbrada en la Secretaría de Seguridad Pública, más tranquilo dormirá.
Por Redacción > Quequi