LA DIOSA IXCHEL. El Castillo
MUY DUDOSAS LIBERACIONES
Comentarios alejados totalmente del cumplimiento del castigo por la comisión de delitos o de daños provocados a la población, a los ciudadanos, son los referentes a la excarcelación de Carlos Trigos, extesorero de los municipios con mayor recaudación en el estado: Benito Juárez y Solidaridad. Se habla lo mismo del otorgamiento de libertad, merced a un acuerdo entre quienes han dominado el terreno político de los últimos años, que de los apoyos monetarios entregados a las campañas del pasado proceso electoral, o de la posibilidad de descubrir algunos “secretos” provocadores de derrumbes gubernamentales. Todo es aceptable, menos esa libertad y su relación con la inocencia. Documentadas quedaron todas las propiedades de este ex funcionario municipal, imposibles de conseguir ahorrando la totalidad de ingresos salariales, incluidos bonos y prestaciones.
Poseedor de la agencia funeraria a la cual acuden los deudos de quienes cuentan con posibilidades económicas suficientes para distinguirse de entre la mayoría, Trigos ha estado presente en tantas charlas como cuerpos han sido velados. En los últimos tiempos hubo un mayor número de menciones, al revelarse su disposición para participar apoyando a quien logró rescatarlo de las actividades bancarias, consideradas muy menores para su grado de inteligencia y preparación. Así también fue requerido, dada la fortuna lograda, por otros grupos a los cuales les seguía guardando reconocimiento.
Totalmente ciertas o medianamente reveladoras de la verdad, han resultado estas versiones, a las cuales se les agregan grandes dosis de inconformidad, al presentarse este hecho en los momentos en los cuales la población que votó por un cambio esperaba ver las primeras acciones ligadas a la desaparición de una corrupción ejercida durante los trienios municipales en los cuales alcaldes y tesoreros lograron amasar abultadas fortunas. De por sí, y dada la ausencia de información, muchos dudaban de la estancia de Trigos dentro del penal. Otros tantos hablaron de las comodidades en las cuales vivía su retención. Ahora la moda advierte, se dejaron todos los aparatos, colchón, regadera eléctrica, ventiladores, enfriador, etcétera, ante la posible llegada de otro ocupante. Nada superior a los argumentos sobre irregularidades en los procesos para lograr la libertad, de los dispuestos a pagar por ella o de quienes se sabe forman parte de grupos en abierta y franca complicidad.
Por una y otra forma de lograr que fuera Trigos de nuevo un hombre libre, se ve una mano meciendo la cuna, una mano negra, como se dice coloquialmente y, de acuerdo a los argumentos presentados próximamente por la Fiscalía, se sabrá si en verdad existe la disposición de poner en marcha la correcta aplicación de la justicia, la esperada para demostrar su alejamiento de las argucias para mantener viva la tan rechazada impunidad vigente.
En un afán de recobrar la confianza justo en ese renglón tan sensible como lo es la seguridad, bueno será informar sobre el destino de los dólares decomisados y lo referente al destino de quienes fueron aprehendidos con este dinero. Entre interrogantes ha quedado a dónde fueron a parar aquellos 40 millones de pesos que pretendieron transportar por la vía aérea 4 sujetos. Se dijeron empleados de una empresa de seguridad privada. Al momento de la investigación, resultó que no funcionaba en el domicilio declarado. Quiénes eran, de dónde provenía el dinero, a quién iba destinado y muchas otras interrogantes, siguen sin respuesta. Ni cómo confiar.