Se manifiestan por competencia desleal.

Con una manifestación en las oficinas de la presidencia municipal de Benito Juárez, que luego terminó en las de la Secretaría General, alrededor de 30 vendedores pertenecientes a la Alianza de Comerciantes Establecidos en Cancún, conformada por más de 500, exigieron la clausura de la Expo Familiar Outlet que se lleva a cabo en el centro de Espectáculos Nichupté, la cual continuará una semana más en la ciudad, a pesar de haber concluido éste 9 de agosto.
Humberto de Ita López, uno de los representantes de la alianza, aseguró que éste evento externo, como otros que han llegado a Cancún, se han llevado a cabo bajo una serie de irregularidades, como el estar exentos de pagos de permisos de Protección Civil, cursos de Bomberos y demás licencias, así como el pago por el uso de toldos que las autoridades locales a ellos sí les exigen.
Carlos López, uno de los manifestantes, informó que en la Expo Familiar Outlet sólo habilitaron 30 espacios para los vendedores locales «a manera de convencimiento para que ya no exigieran más», dijo, asegurando que son insuficientes para los más de 500 comerciantes que conforman la alianza y que tienen sus comercios establecidos en El Parián, avenida Tulum, José López Portillo, Mercado 28, Mercado 23 y regiones populares, entre otros.
Carlos López agregó que al comercio formal les cobran por un toldo de 3×3 metros un importe de cinco mil pesos para poder usarlo y vender. «Por el toldo que los de la expo Outlet están usando, según lo que nos cobran a nosotros, debieron de haber pagado cinco millones 200 mil pesos. ¿En verdad está entrando esa cantidad a las arcas de Cancún o a la cartera de algún funcionario en específico?, acotó.
Karla Sofía Barranco exigió una respuesta a las autoridades sobre porqué permiten la comercialización de productos en las expos foráneas, como la Outlet o la de Ticul, cuando sólo debieran mostrar al público, no vender. «Y si venden, ¿Por qué no les exigen como comercio establecido? del 14 al 18 de julio estuvo la expo de Ticul, y nosotros comprobamos que carecían de permisos», externó.
Pilar Carrillo, funcionaria del gobierno municipal, dijo que en cuatro ocasiones llamaron a los representantes para entablar una conversación con el secretario General, pero como no respondieron, tuvo que salir por una reunión de trabajo, y lo único que les proponía era agendarles una cita para que fuesen atendidos, a lo cual, la multitud enardeció y continuó alegando una audiencia con algún funcionario que pudiera recibirles y darles una solución a su demanda. (Por Heiby Morales)