Explican procesos sobre devolución de impuestos y regularización fiscal
Cancún, 5 de febrero.- En un análisis detallado sobre el procedimiento de devolución de impuestos y las medidas de regularización fiscal, Gilberto Peña Cruz, delegado de Quintana Roo de la Procuraduría de la Defensa del Contribuyente, explicó cómo opera el mecanismo de reembolso del SAT y cuáles son las recomendaciones para evitar errores que impidan la devolución.
El funcionario destacó que, una vez que el contribuyente presenta su declaración anual y se detecta un saldo a favor —por ejemplo, cuando los descuentos de impuestos efectuados por la empresa superan la obligación fiscal real del contribuyente—, el SAT inicia el trámite de devolución.
“Cuando el fiscal solicita la devolución y el SAT la acepta, el proceso se inicia y la devolución se efectúa en un plazo de entre 30 y 40 días a partir de la presentación de la declaración anual”, puntualizó, entrevistado por Radio Fórmula.
El delegado recomendó a los contribuyentes presentar sus declaraciones de manera oportuna para revisar posibles errores en la facturación electrónica (CFDI) y evitar que se incluyan ingresos que no correspondan, lo cual podría obstaculizar el proceso de devolución.
El experto abordó también situaciones particulares que pueden complicar la declaración.
Múltiples fuentes de ingreso: Para quienes tienen más de un trabajo o ingresos adicionales por inversiones, herencias o donativos, es fundamental declarar correctamente cada uno de estos conceptos.
Herencias y donativos: Se debe prestar atención a los límites establecidos por el SAT, ya que ciertas cantidades están exentas de impuestos, mientras que montos superiores a 400 o 500 mil dólares pueden requerir formalidades notariales para su correcta documentación.
En el mismo contexto, explicó la reciente campaña de regularización fiscal lanzada por el SAT, dirigida tanto a personas físicas como morales con ingresos de hasta 35 millones de pesos.
El programa ofrece una disminución del 100% en multas, recargos y gastos de ejecución para aquellos contribuyentes que regularicen su situación fiscal correspondiente a los ejercicios de 2023 y anteriores.
“Esta campaña está especialmente diseñada para contribuyentes que han omitido presentar ciertas declaraciones o que tienen contribuciones no determinadas por la autoridad federal. Es una oportunidad para subsanar irregularidades y evitar que se acumulen mayores multas y recargos”, afirmó.
El delegado aclaró que los beneficios de la campaña aplican únicamente si el contribuyente decide aceptar y regularizar la situación, desistiendo de cualquier demanda o impugnación ante el Tribunal Federal de Justicia Administrativa. Además, destacó que, en el caso de las personas morales, el plazo para presentar la declaración es el 31 de marzo, lo que implica que las sociedades deben estar especialmente atentas y contar con asesoría contable adecuada.
Peña Cruz advirtió que la falta de presentación de declaraciones, tanto mensuales como anuales, puede derivar en multas significativas, aplicándose además la actualización por inflación y otros recargos.
“La omisión en la declaración mensual o anual no solo genera multas fuertes, sino que se acumulan recargos y actualizaciones que incrementan el monto original a pagar”, expresó.
