Blindará Trump la frontera

Nombra a Tom Homan, un “zar” de mano dura para el control migratorio de Estados Unidos.

Estados Unidos
Por Agencias

El virtual presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ya empieza a dibujar los contornos de lo que promete ser una administración implacable en su política migratoria. Trump anunció el nombramiento de Tom Homan como su “zar de la frontera”, un rol especialmente diseñado para blindar la frontera sur y aplicar una política de control migratorio que deje huella. También elegiría a Stephen Miller como subdirector del gabinete para políticas de la Casa Blanca, lo que colocaría al arquitecto de la restrictiva agenda migratoria del primer mandato del republicano y cerebro detrás del “súper muro”, en un puesto de alto nivel.

El republicano ha optado por Homan, un veterano de la inmigración en Estados Unidos que previamente dirigió el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) durante su primer mandato. Este regreso al poder de Homan evoca una serie de medidas de 2017, cuando estuvo al frente de la controvertida política de separación de familias en la frontera, una iniciativa que levantó críticas a nivel global. A sus 62 años, Homan ahora enfrenta una misión mucho más ambiciosa: proteger la “frontera sur, la frontera norte, la seguridad marítima y de la aviación”, según las palabras del mismo Trump.

La relación entre Trump y Homan data de años atrás, consolidada por una visión común sobre lo que ambos consideran “orden migratorio”. En su anuncio en Truth Social, Trump se refirió a Homan como el funcionario ideal para ejecutar lo que parece perfilarse como una de las políticas más rígidas de blindaje fronterizo en la historia del país. “Conozco a Tom desde hace mucho tiempo y no hay nadie mejor para vigilar y controlar nuestras fronteras”, expresó Trump, destacando que Homan tendrá también a su cargo todas las deportaciones de inmigrantes en situación irregular en Estados Unidos.

A pesar de las afirmaciones de Homan en las que asegura que su política no significará “redadas masivas” o una “limpieza” de comunidades, la postura firme del “zar de la frontera” promete marcar un cambio abrupto frente a la política migratoria del actual gobierno de Biden, al que Trump ha acusado de permitir la “crisis migratoria” en la frontera.

Este anuncio, además, sienta las bases para una administración en la que Trump pretende trabajar con un equipo de leales que respalden sus políticas sin vacilaciones. A menos de tres meses de su asunción en enero, la línea está marcada: Trump se dispone a blindar las fronteras y a consolidar su visión de un Estados Unidos menos receptivo ante la inmigración.

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