Atacan de nuevo ‘taximios’
Amenazan a mototaxista fuera del aeropuerto.
Por Luis Roel Itzá
Quequi
Los taxistas de Cozumel siguen creyéndose los amos y los únicos que tienen que dar el servicio de transporte, se adueñan de áreas públicas y hasta zonas prohibidas para estacionarse con tal de acaparar a todos los usuarios posibles, en días pasados amenazaron a un mototaxista que atendió el llamado de un usuario a escasos metros de la salida del aeropuerto internacional, donde los taxistas hacen sitio en espera de viajeros que no utilizan el servicio de transporte del aeropuerto y salen a la avenida Antonio González Fernández (Boulevard aeropuerto) y después mintieron al decir que habían sido amenazados por el mototaxista.
Como siempre han sido, los chafiretes necesitan estar en grupo para poder actuar y tratar de intimidar a un mototaxista que atendió a un usuario que le solicitó servicio estando a 30 metros de la salida del aeropuerto, mientras que los taxistas que estaban en el carril contrario se enojaron al asegurar que les estaban quitando a sus clientes, lo cual es completamente falso, ya que no existe ningún acuerdo ni hay restricción alguna para que los mototaxis den el servicio que los taxistas solo dan en horario de arribo de los vuelos y después no se les ve más en la zona, abandonando a los usuarios locales por atender turistas extranjeros.
Misma situación acontece en algunas zonas como la 10 avenida con Benito Juárez, frente a la iglesia San Miguel Arcángel, donde se han adueñado de una zona donde existe un señalamiento de prohibido estacionarse y aun así, corren con insultos a quien se atreva a ocupar por unos minutos «su lugar», donde además aseguran que el Imoveqroo y Tránsito les dio permiso, todo para poder subir usuarios que llegan del muelle y no toman los taxis del sitio porque les cobran prácticamente el doble.
En los sitios que les han sido asignados y que están debidamente delimitados por Tránsito, los “taximios” hacen uso de más y agreden a mototaxis que «recogen» usuarios a 20 metros de donde están en espera, y es porque aún no comprenden que la ciudadanía ha decidido abandonarlos como ellos mismos lo hicieron por buscar ganarse dólares atendiendo a los turistas y olvidándose de la gente local.