‘Cancha sigue dispareja’
De acuerdo con el reporte del STARC, se debe regular las rentas vacacionales.
Por Blanca Silva>Quequi
El Centro de Investigación Avanzada de Turismo Sostenible de la Universidad Anáhuac (STARC, por sus siglas en inglés), presentó la actualización del estudio de las rentas vacacionales en el Caribe Mexicano, que destaca que en materia de alojamiento la cancha sigue dispareja con el sector hotelero, dejando de lado que el esquema se ha convertido en un verdadero negocio que requiere ser regulado, como se ha hecho en otras partes del mundo como Nueva York.
El director del STARC, Francisco Madrid Flores, advirtió que las plataformas digitales de hospedaje representan ya el 50% de la oferta de hospedaje de Quintana Roo, cuyas ventas estimadas alcanzan casi mil 100 millones de dólares y generan ingresos por 730 millones de dólares, lo cual refleja el volumen de negocio que representan al contabilizar 31 mil 447 unidades ofertadas con 64 mil 939 cuartos.
De esta manera, las rentas vacacionales de Quintana Roo representan casi el 20% de la oferta total nacional de este segmento, cuya cifra es de 161 mil 588 con 355 mil 720 unidades, luego de que la cifra pasara de 18 mil 251 en 2019 a 25 mil 128 en 2023 con una ocupación promedio de 57.3% y una tarifa promedio de 140.6 dólares, pues la expansión de la oferta no impacta su ocupación ni tarifa, que se mantienen a la alza.
El reporte elaborado a solicitud de la Asociación de Hoteles de Cancún, Puerto Morelos e Isla Mujeres (AHCPM&IM), reveló que un solo propietario tiene hasta 224 unidades en el Caribe Mexicano, mil 361 tienen cuatro o más unidades, dos mil 33 tienen al menos tres y tres mil 526 tienen dos o más unidades, sobre las cuales advierten no hay ningún control y se pueden prestar a la comisión de diversos delitos y generar una mala imagen del destino.