Habrá represalias: Biden
Por Agencias
La escalada de la guerra en Gaza persiste, marcada por dos meses de intensos ataques protagonizados por milicias respaldadas por Irán, principal apoyo de Hamas, contra las Fuerzas Armadas de Estados Unidos, principal aliado de Israel. En el último suceso, un dron suicida provocó la muerte de tres soldados estadounidenses y dejó a otros 34 heridos.
La ubicación exacta del ataque ha generado discrepancias, ya que Washington sostiene que ocurrió en Jordania, mientras que Ammán afirma que tuvo lugar en la base estadounidense de Al-Fanj, en la frontera jordano-siria, dentro del territorio sirio. Los heridos, afectados por conmociones cerebrales, fueron evacuados para recibir tratamiento médico. Este incidente se suma a otro ocurrido hace dos semanas en Irak, donde otro soldado estadounidense resultó gravemente herido en circunstancias similares.
Desde Carolina del Sur, donde se encuentra en campaña electoral, el presidente Joe Biden fue informado por altos funcionarios de seguridad sobre el ataque. En un comunicado, Biden condenó el acto, atribuyéndolo a grupos militantes radicales respaldados por Irán operando en Siria e Irak. La Resistencia Islámica en Irak se atribuyó la responsabilidad del ataque, amenazando con más acciones.
Irán respalda diversas milicias en la región, incluyendo a Hamas en Gaza, Hizbolá en Líbano, Siria, Irak y los hutíes en Yemen. Biden calificó el ataque como «despreciable y totalmente injusto,» advirtiendo que todos los responsables serán considerados y enfrentarán las consecuencias.
Hasta ahora, Estados Unidos ha respondido con moderación a los ataques en Irán y Siria, limitándose a operaciones limitadas contra las unidades involucradas. Sin embargo, la respuesta en Yemen ha sido más decidida debido al riesgo para el comercio mundial. Este incidente marca las primeras bajas estadounidenses en combate desde la desaparición de dos miembros de las Fuerzas Especiales en Somalia.