Se ‘amarran’ los tortilleros el bolsillo
Por Pablo Vázquez
Baldemar Hernández Domínguez, presidente de la Unión de Industriales de la Masa y la Tortilla, expresó su preocupación sobre el aumento en el costo de la materia prima y de algunos impuestos que podrían impactar en el precio de la tortilla.
Hernández Domínguez señaló que, hasta el momento, las principales empresas proveedoras de harina como Minsa, Maseca, Maizza y Harina del Campo no han realizado un aumento desde diciembre. Según el presidente de la Unión, estas empresas suelen comunicar los ajustes de precio sin previo aviso.
«Prácticamente, esas empresas, la verdad, luego nos mandan el aviso de precio sin previo aviso, o sea, nos avisan una semana antes, no nos mandan algo así como que digan para el siguiente mes o para el siguiente trimestre del año vamos a tener un aumento en el costo, no lo mencionan. Entonces, para ese tema, todavía no tenemos nada concreto», enfatizó Hernández Domínguez.
El presidente de la Unión de Industriales de la Masa y la Tortilla también abordó la escalada en los costos de producción. Según sus declaraciones, el costo del saco de harina se ha disparado, pasando de 200 pesos en el año 2020 a la actualidad, donde oscila entre 390 y 400 pesos.
«Hubo un incremento parcial en el precio de la tortilla en diciembre del año pasado, hace apenas unos meses, tuvimos un incremento de un peso. Esperamos que este año, de nuestra parte, si no hay algún incremento en los insumos, sigamos manteniendo ese precio. El kilo de tortilla está a partir de los 27 pesos», detalló Hernández Domínguez.
No obstante, advirtió sobre ciertos comercios que elevan los precios. «En algunas otras llega a 30 pesos por revendedores, como las tiendas de abarrotes, carnicerías y fruterías. Actualmente, en Benito Juárez, el precio oscila entre 27 y 28 pesos. Las de maíz las he visto hasta en 29 y 30 pesos, ya que el maíz es más caro debido a la mayor laboriosidad en su producción, que implica coser, lavar y moler el maíz».