Desdeñan a discapacitados; sigue Playaparq sin designar los 25 cajones más para que se estacionen en el Centro

Por Luis García

Quequi

A pesar de que los últimos datos arrojan que más del 10% de la población de Solidaridad vive con algún tipo de discapacidad y también hay un segmento importante de visitantes con discapacidad, la empresa Promotora de Reordenamiento Urbano, concesionaria de los parquímetros en Playa del Carmen, ha hecho oídos sordos a la solicitud de ampliar el número de cajones para personas con discapacidad en el primer cuadro de la ciudad.

«Todavía no hemos tenido una respuesta, se está trabajando mediante la Comisión de Transporte, que es donde hemos presentado estos temas», así lo señaló el titular de la unidad de Atención para las Personas con Discapacidad y de la Tercera Edad, Dagoberto Olguín, pues si bien no se trata de entrar en querellas con la empresa de los parquímetros, «si es importante hacer conciencia de la necesidad de estos espacios».

Recordó que se le hizo la solicitud formal al gerente de la empresa Diego Gracidas de 25 cajones, sin embargo, hasta el momento no ha habido respuesta favorable.

Abundó que «ellos contestaron que se pueden estacionar en cualquiera, siempre y cuando traigan su stiker o su placa con el logo de discapacidad».

Esta respuesta no satisface en nada el objetivo por el cual se está solicitando que se coloquen en el Centro de la ciudad 25 cajones, al menos marcados para las personas con discapacidad.

«Pero necesitamos que los espacios estén asignados, porque como lo hemos comentado, sí es importante que estén, porque cuando llega una persona al primer cuadro de la ciudad no se va a estacionar 10 cuadras después, se quiere estacionar lo más cerca posible de dónde va a realizar su trámite o pagar su servicio».

Como se recordará, la Ley Federal de Inclusión para personas con discapacidad establece las facilidades que se deben de brindar de movilidad, estacionamiento y accesibilidad a este sector de la población en zonas para realizar trámites o movimientos bancarios, entre otros, cosa que no se ha cumplido.