Llegarán en plenitud; en excelentes condiciones O’Shaquie Foster y Eduardo Hernández rumbo a su guerra en Cancún
Por Alberto Salazar
El estadounidense O’Shaquie Foster defenderá su título mundial de peso Superpluma que avala el Consejo Mundial de Boxeo (CMB-WBC, por sus siglas en inglés) ante el mexicano Eduardo “Rocky” Hernández en la ciudad de Cancún, en escenario por confirmarse.
Ambos peleadores enviaron su prepesaje de 30 días al CMB previo al combate. Foster pesó 143 libras (64.863 kilogramos), mientras que Hernández Pérez registró 140.6 libras (63.775 kilos), en un trámite obligatorio que fue organizado por William Boodhoo, responsable de dar seguimiento a todos los requerimientos médicos.
El evento es presentado por las promotoras “Cancun Boxing” que preside Pepe Gómez, “Boxing Time Promotions” que dirige Guillermo Rocha, y “Matchroom Boxing”, que lidera Eddie Hearn, junto a la compañía británica de streaming, DAZN, que será la encargada de difundir las imágenes desde este destino turístico por excelencia hacía países de América, Europa y Asia.
El “Ice Water” Foster, quien posee marca de 20 triunfos, 2 fracasos y 11 nocauts, consiguió el cinturón verde y oro en febrero anterior, convirtiéndose en el primer peleador en derrotar al mexicano Rey Vargas para convertirse en campeón mundial, en pleito disputado en el “Alamodome” de San Antonio, Texas.
El nativo de la ciudad de Houston se enfrenta nuevamente a un oponente mexicano y lo hará en su primera defensa.
“Estoy muy emocionado por la oportunidad de volver al cuadrilátero y defender mi campeonato. Una vez más, estaremos entrando en territorio desconocido, así que estoy ansioso por demostrar otra vez que soy el mejor del mundo y que estoy listo para alargar mi reinado”, afirmó el monarca.
En tanto, “Rocky” Hernández, quien ostenta récord de 34 victorias, una derrota y 31 “anestesiados” logró su oportunidad para enfrentar a Foster gracias a una racha de seis victorias por nocaut registrando su sexto consecutivo con una paliza en el tercer round sobre Héctor García en Monterrey, en julio pasado.