
Crecen adicciones a drogas sintéticas en adolescentes; en pandemia, los “dealers” operaron en redes sociales
Por Soraya Huitrón
Adolescentes y hasta niños de Quintana Roo tienen cada vez más accesibilidad con las drogas, principalmente sintéticas, pues durante la pandemia, los “dealers” se pasaron a las redes sociales.
De acuerdo a información de la Policía Cibernética y de la Fiscalía General del Estado, del 2020 a mediados del 2022 se reportaron 5 mil 800 perfiles y páginas de Facebook que ofrecen drogas como LCD hasta por 150 pesos.
El 70% de los consumidores eran menores de edad de entre 11 hasta los 20 años y esto sin contar a Twitter, Instagram, Telegram y otras plataformas.
La Encuesta Nacional de Consumo de Drogas en Estudiantes reveló que Quintana Roo fue uno de los tres estados con más incremento en el consumo de drogas en adolescentes: del 16% en el 2018 pasó al 23% a inicios del 2022, donde las de mayor consumo son la marihuana, seguida del LCD.
De acuerdo con especialistas en el tema, la pandemia cambió muchas cosas, y la venta de drogas es una de ellas, ya que antes del Covid-19 los principales lugares de venta en Quintana Roo eran los restaurantes y los antros, pero con el cierre de éstos tuvieron que recurrir a las redes sociales en mayor medida.
Señalaron que lamentablemente un mayor número de menores accedieron a un mercado que hasta ahora representaba una mínima parte de sus compradores, pues antes era difícil que ellos se encuentren en los lugares de venta, pero con el confinamiento, y considerando que 8 de cada 10 adolescentes de entre 11 a 17 años tienen acceso a las redes sociales, fue fácil venderles estas sustancias.
Añadió que el aislamiento, la depresión y la ansiedad que provocó la cuarentena, así como el auge de los influencers que demostraban que drogarse era algo “cool”, aumentó el consumo de drogas.
Cabe destacar que en los centros de rehabilitación se reciben hasta 4 veces más adolescentes con problemas de drogas en los últimos 2 años, que en toda la última década.
Es por ello que exhortaron a los padres de familia a estar siempre atentos a los comportamientos de sus hijos, a sus amistades y a los cambios bruscos de estado de ánimo, así como vigilar sus redes sociales y ante la menor señal de alarma tomar acciones con la ayuda de profesionales.