Emotivo reencuentro
Por Alberto Salazar Quequi
En junio pasado circuló un video en YouTube. La cámara del celular apuntaba a Oscar de la Hoya durante una animada reunión. “Don ‘Cholain’ Rivero, usted ha sido el mejor entrenador que yo he tenido”, dijo en esa ocasión el presidente de la promotora “Golden Boy Promotions”.
Ayer, acompañado del promotor Pepe Gómez, el medallista de oro en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992 y seis veces campeón mundial absoluto (Superpluma, Ligero, Superligero, Welter, Superwelter y Medio) avalado por varios organismos desde 1994 hasta el 2007, se reunió en el apacible hogar de “Cholain” Rivero, quien evidentemente mostró su gran felicidad ante tan importante encuentro.
Sentado en un sillón reclinable, vistiendo una tradicional guayabera yucateca y una especie de boina café, el afamado exentrenador sostuvo una animada charla con sus ilustres invitados, todos cumpliendo con el uso del cubrebocas.
Algo de historia
Hacia mediados de los 90, el promotor Bob Arum tenía un diamante en bruto: Oscar de la Hoya, el carismático campeón olímpico de los pesos Ligeros de Barcelona 1992, californiano de nacimiento y mexicano de sangre. Pero la carrera de De la Hoya tenía un problema ineludible: Julio César Chávez. Chávez era la gran figura, entonces querían ganarle para hacer a Oscar ídolo de California.
“Cholain” recordó que les dijo “necesito un año con dos o tres peleas para dejarlo listo para Chávez’. Después de dos peleas, Oscar declaró a la prensa que había aprendido más conmigo en esos meses que en todo el resto de su vida”.
Y llegó la noche. El 7 de junio de 1996, en el Caesars Palace de Las Vegas, De la Hoya venció en cuatro rounds al Gran Campeón Mexicano. La estrategia de “Cholain” Rivero fue el movimiento.
“Yo le decía a Oscar acércate, lo agarras del hombro derecho, no se va a mover. Y cuando se mueva, retrocede. Como está mal parado, el peso de su cuerpo lo tiene sobre la pierna izquierda, no se perfila y está fuera de balance. Queda erguido. Hay que sacarlo de su pelea, porque cuando avanza, te golpea. No lo dejes avanzar, no lo dejes entrar, fíntalo. Es como el ‘Canelo’, retrocede mal y así no pueden pegar, porque está fuera de balance”.
Títulos con “Cholain”
Rivero Gamboa, quien cumplirá en octubre próximo 92 años de edad, comentó que Oscar conquistó varios campeonatos, “pero los más valiosos los ganó bajo mi conducción”.
El 6 de mayo de 1995 venció por nocaut en el segundo episodio al mexicano radicado en California, Rafael Ruelas para que De la Hoya se adjudicara el título de peso Ligero avalado por la Federación Internacional de Boxeo (FIB), en combate disputado en el Caesars Palace de Las Vegas.
El 7 de junio de 1996, llegó el choque contra el Gran Campeón Mexicano Julio César Chávez González y De la Hoya se impuso por nocaut técnico en el cuarto episodio, en el duelo sostenido en el Caesars Palace, donde el “Golden Boy” se adueñó del fajín de campeón de peso Superligero del Consejo Mundial de Boxeo (WBC, por sus siglas en inglés).
Y, el 12 de abril, Oscar se apoderó del cinto de campeón mundial absoluto de peso Welter del WBC, luego de superar por la vía de las tarjetas (115-111, 116-110 y 116-110) al estadounidense Pernell Whitaker, en pelea celebrada en el “Thomas & Mack Center”, de Las Vegas, Nevada.
