Con madera de campeón
Por Alberto Salazar Quequi
Con 22 años de edad y miembro de una ilustre dinastía de guerreros con casta de campeones, el cozumeleño Tomás Ricardo Salgado Landero se encaminaba con paso sólido hacia las alturas del pugilismo profesional, tal y como lo había logrado en el terreno amateur, hasta que la pandemia originada por el Covid-19 frenó momentáneamente su camino.
El “Pichi” Salgado llegó al boxeo de paga antecedido de una brillante trayectoria amateur, en la cual participó en olimpiadas nacionales conquistando ocho medallas de oro en las etapas municipales, regionales y estatales, además de una presea de bronce en un torneo de Primera Fuerza nacional.
La historia inició en el seno familiar cuando su tío Henry lo llevó a entrenar; así siguió los pasos de su tío Enrique «Henry» López, Alejandro «Alex» López, Juan Carlos «Hugo» López y su padre Ricardo «Pichón» López.
El viernes 20 de julio del 2018, ya con la guía de sus promotoras “Cancun Boxing” y “Boxing Time Promotions”, el guerrero cozumeleño hizo su presentación oficial enfrentando al cancunense José Antonio “Zurdo” Torres imponiéndose por la vía del nocaut en el cuarto round, en contienda de respaldo de la gala boxística “¡The Real Deal!” que se disputó en la internacional “Oasis Arena Cancún” y que fue estelarizada por la pelea del campeonato Internacional de peso Superpluma de la Organización Mundial de Boxeo (OMB) entre el estadounidense Lamont Roach Jr. y el colombiano Deivi “Cabo” Julio Bassa.
El prospecto cozumeleño es sin duda una de las cartas fuertes del boxeo quintanarroense, pues es dueño de un estilo muy técnico y contundente en la división de los Supermoscas. No en vano ha recibido adiestramientos de expertos forjadores de peleadores que han destacado en el ámbito profesional como el “Sugar” Salgado y otros que han puesto muy en alto el nombre de Cozumel en eventos estatales, regionales y nacionales en el terreno de aficionados.
Después de Torres, llegaron compromisos ante el portomorelense Moisés “Puchulí” Rufino, el tulumnense Ricardo “Feroz” Colorado” y el playense Alberto “Príncipe” Rivero, a quienes derrotó gracias a su excelente ritmo de boxeo, sus efectivas combinaciones con extraordinaria precisión.
Sin embargo, en octubre del 2019, sufrió una desagradable sorpresa al perder su etiqueta de invicto al caer por decisión unánime ante el cancunense Alejandra “Chavita” Trinidad, en una batalla que se desarrolló bajo un frenético ritmo de golpeteo.
Si bien esa derrota le resultó dolorosa, también le permitió detectar algunas deficiencias que ha logrado corregir y está listo para demostrarlo en la primera oportunidad que se le presente y que espera sea pronto, en cuanto las condiciones epidemiológicas lo permitan.
Con marca de cuatro victorias, tres de ellas por la vía del nocaut, el “Pichi” Salgado no quita el dedo del renglón y no deja de soñar con llegar a lucir un emblema de campeón en su cintura.