Hace 15 años que no se vivía el paso de huracán
CANCÚN
Pedro Olive > Quequi
Quintana Roo recibe al cuarto huracán de mayor intensidad en su historia, eso no ha frustrado su crecimiento, pues supo levantarse tras el paso de los fenómenos hidrometeorológicos “Janet”, “Gilberto”, “Wilma”, y se espera lo mismo con el paso de “Delta”.
La primera gran prueba para el estado ocurrió el 27 de septiembre de 1955, el gobierno de Margarito Ramírez Miranda, mandamás del Territorio Federal de Quintana Roo, anticipó que la zona baja de Chetumal era muy peligrosa y que la gente debía salir de ahí ante la presencia del huracán “Janet”.
Pese a que fueron enviados avisos a los habitantes de Xcalak y Mahahual, para remarcar la peligrosidad del ciclón, que en el Caribe ocasionó la muerte de 200 personas, hubo quienes tomaron la llegada del meteoro como un evento social, muy bienvenido.
El resultado oficial de ese meteoro fuero 87 muertos, de estos 49 fueron niños y decenas de desaparecidos, tras éste, comenzó la primera reconstrucción ante los embates de un fenómeno natural de esta naturaleza.
La segunda gran prueba llegó en septiembre de 1988, con la presencia del huracán “Gilberto”, considerado uno de los ciclones más devastadores del Atlántico, este se formó el 8 de septiembre de 1988 como depresión tropical número 12, durante su desplazamiento por las agua del Caribe fue intensificándose hasta convertirse en un huracán de categoría 3.
En México, Gilberto azotó los estados de Quintana Roo, Yucatan, Campeche, Nuevo León, Coahuila y Tamaulipas, causando la muerte de por lo menos 250 personas, y cerca de 150 mil damnificados, así como pérdidas por 750 millones de dólares, en el caso de la entidad, el impacto fue aún mayor porque iniciaba la vida de una de las joyas de México, Quintana Roo.
Tras el impacto de este fenómeno, el 14 de septiembre de 1988, el levantamiento de Quintana Roo fue inminente, con la participación de la ciudadanía, apoyo de gobierno, el sitio resplandeciente volvió a ser un referente en recuperación y turismo, manteniéndose así durante casi 17 años, hasta la tercera prueba de la historia.
Llegó el viernes 21 de octubre de 2005, Vicente Fox Quesada era el presidente de la República, Félix González Canto, gobernador de Quintana Roo; y Francisco Alor Quezada, presidente municipal de Benito Juárez, ese día quedó marcado como el inicio de la tercera gran tragedia meteorológica más en la historia de Quintana Roo.
El huracán “Wilma”, impactó el territorio de Quintana Roo con categoría 5 en la escala Saffir-Simpson, bajo la denominación de “superhuracán”, sus embates dejaron a Cancún, la joya del Caribe Mexicano, bajo los escombros y con un reto grande de recuperación.
Una vez más, Quintana Roo y Cancún inició un proceso de reestructuración económica y social, debido a que muchas familias se vieron afectadas, esta situación representó un logro más superado como sociedad y gobierno luego de un año, cuando comenzó a restablecerse el destino.
La madrugada de hoy, llegó a Quintana Roo la cuarta prueba meteorológica en su historia, el huracán “Delta” con categoría 4 en la escala Saffir-Simpson, que alertó a siete municipios de la Zona Norte de la entidad, Tulum, Cozumel, Solidaridad, Puerto Morelos, Isla Mujeres, Lázaro Cárdenas y Benito Juárez, con un poder devastador similar al de “Wilma”.
En esta ocasión y a diferencia de otros años, la recuperación será un logro de los quintanarroenses y el Gobierno del Estado, debido a que la administración federal puso sobre la mesa la eliminación de fondos y fideicomisos, entre ellos el Fondo de Desastres Naturales (Fonden), que en teoría apoya a la recuperación de familias víctimas de embates naturales.