Soportó BJ los embates de Gamma
Por Blanca Silva Quequi
El paso de la tormenta tropical “Gamma” no causó ninguna inquietud entre los alrededor de 41 mil turistas que había el fin de semana en el Caribe mexicano ni afectaciones en el Aeropuerto Internacional de Cancún (AIC), más allá de la cancelación de 39 operaciones y la demora de otras 20, aunque sí provocó el hundimiento de más de 30 embarcaciones menores en Cancún e Isla Mujeres, pertenecientes a marinas y cooperativas, pues los vientos fueron más fuertes de lo previsto.
El presidente de Asociados Náuticos de Quintana Roo (ANQR), Francisco Fernández Millán, explicó que el hundimiento se debió a que los vientos de la tormenta tropical fueron más fuertes de lo que habían proyectado al converger con el frente frío, por lo que las previsiones tomadas resultaron insuficientes.
Aunque con oportunidad, la Capitanía Regional de Puerto les dio instrucciones de asegurar sus embarcaciones, detalló que en algunos casos el problema fue que no funcionaron las bombas de achique o no fueron suficientes para evitar el hundimiento, mientras que en el caso de las pesqueras es porque no cuentan con éstas y son más endebles.
Adicionalmente, el sector reportó pérdidas económicas aproximadas de 240 mil dólares por dos días de inactividad (sábado y domingo), pues el viernes todavía pudieron operar y esperan reanudar actividades hoy lunes, luego de que ayer se permitiera el cruce de embarcaciones sin actividades recreativas.
Recordó que en estos días el sector tenía previsto operar al 80% de su capacidad instalada, que es de entre mil 200 y mil embarcaciones, ya que todavía el 20% de las marinas siguen inactivas esperando el color verde en el Semáforo Epidemiológico y que se incremente la afluencia de turistas.
Por su parte, la secretaria estatal de Turismo, Marisol Vanegas Pérez, informó que sólo en Tulum hubo un poco de temor por la caída de árboles, pero en general el paso de la tormenta tropical “Gamma” transcurrió sin contratiempos para los turistas, quienes estuvieron seguros y no hubo quejas ni inquietudes, lo cual refleja la capacidad del sector turístico para activarse en cualquier momento.
De igual manera, fuentes del AIC informaron que éste operó de manera normal y no se registró ningún contratiempo, lo cual demuestra que está listo para atender cualquier contingencia, ya que ni siquiera hubo necesidad de activar las plantas de energía eléctrica, ya que todo se redujo a algunos árboles y postes caídos, lo cual se mantuvo bajo control.
