F1: ¡así arrancó la temporada 2020!
Agencia
Nunca en 70 años la Fórmula 1 empezó tan tarde una temporada. El almanaque tendrá 186 hojas menos el domingo cuando en el autódromo Red Bull Ring, de Spielberg, el Gran Circo ponga en marcha el primer Gran Premio del campeonato 2020.
No será el receso más extenso de la categoría, que demoró 38 semanas entre la última carrera oficial de 1950, en Italia, y la apertura en Suiza, en 1951.
La pandemia mundial de Covid-19 modificó el mapa, los cronogramas y las costumbres; el movimiento Black Lives Matter descubrió en la F.1 una bandera para la lucha contra el racismo y la batalla por la diversidad detectó una aliada.
La nueva temporada ofrecerá alteraciones, particularidades, también sospechas: Mercedes será, como desde 2014, la escudería que marcará el pulso, con Ferrari y Red Bull Racing al acecho, y Lewis Hamilton, que intentará igualar la marca de siete títulos de Michael Schumacher, el favorito entre los pilotos. El regreso de la actividad será, a la vez, una vuelta a los inicios de la F.1: como en los primeros años, solo ocho citas están confirmadas en el calendario.
El coronavirus estableció un nuevo orden y por primera vez en 1019 Grandes Premios, la F.1 será un espectáculo sin público -en las tribunas se colocaron banderas con las figuras de los pilotos y otras con la leyenda WeRaceAsOne [Nosotros corremos como uno], campaña que el Gran Circo inició contra el racismo y la discriminación- y sin el tradicional podio de premiación.
Estrictos protocolos sanitarios y de seguridad, pruebas de Covid-19 cada cinco días a las 3.000 personas -escuderías, personal esencial de la F.1, de la organización y la transmisión de TV-, un reducido número de 80 integrantes por equipo con acceso al circuito, viajes sellados, distanciamiento social y contacto limitado con la comunidad local, el paquete de reglas que deberán respetarse sin concesiones, aunque nada garantiza la posibilidad de contagio. La F.1 sentenció que no suspenderá un Gran Premio ante un caso positivo de coronavirus , pero el temor está latente en el paddock, que desanduvo esa experiencia en Melbourne, con los casos de los mecánicos de McLaren. Para minimizar el riesgo de transmisión y circulación del virus, los conjuntos formaron grupos y subgrupos.
Los tradicionales motorhome donde funcionan los equipos fueron reemplazados por módulos: cada piloto tiene uno y existe un tercero para los directores de escuderías; los conjuntos tienen un comedor en espacios separados en el edificio paddock del Red Bull Ring y para reforzar las medidas de distanciamiento social entre miembros de diferentes escuderías se colocaron baños exclusivos para cada escuadra. La frialdad y el trato «distante» en estos tiempos es sinónimo de seguridad, por esa razón los tapabocas son obligatorios, el pitlane es cerrado, existen carriles únicos de tránsito para el personal de los equipos y los dispenser de alcohol en gel se multiplican por todo el circuito.
En Europa, como hace 54 años
Después de 24 años el trazado callejero de Melbourne no solo no abrirá el campeonato, si no que quedó fuera del calendario. Tampoco Mónaco ofrecerá su glamour con los yates de los magnates y los personajes del jet set, debido a la imposibilidad de organizar la logística, mientras que Zaandvort (Países Bajos), que se preparó para el regreso, tras 35 años, tendrá que esperar hasta 2021 para ser parte del programa; tampoco Azerbaiyán y Singapur recibirán al Gran Circo este año. Europa será la señal de largada, algo que no sucede desde 1966: antes, Mónaco; ahora, Austria, que ayer fue azotada por un temporal de lluvia y se exhibirá con una fecha doble: el 12 de julio, la F.1 repetirá en Spielberg. La travesía continuará por Hungría (19/7); Gran Bretaña, que organizará dos carreras: el 2 y el 9 de agosto, la segunda bajo el lema GP 70 aniversario -se cumplió el 13 de mayo pasado-; España (16/8), Bélgica (30/8) e Italia (6/9).
El resto es una proyección supeditada al comportamiento de la pandemia de Covid-19, por lo que la gira por Euroasia (Rusia, China y Vietnam, de confirmarse será su estreno), la visita a América (Estados Unidos, México y Brasil) y el cierre en el Golfo Pérsico (Bahrein y Abu Dhabi, donde se corrió el último GP de F.1, el 1° de diciembre pasado) será materia de análisis y debate entre Liberty Media, la FIA y los gobiernos de cada país. Canadá y Portugal se alistan como escenarios alternativos para engrosar el número de carreras de la temporada.
El futuro del calendario es incierto y la legitimidad de un campeón queda a resguardo desde el reglamento, ya que en la actualidad ocho Grandes Premios es el mínimo para una temporada de F.1 y 22, el máximo. El primer campeonato tuvo siete GP’s, al igual que el de 1955; ocho carreras albergaron las temporadas 1951, 1952, 1956, 1957 y 1961. «Si se consigue hacer un calendario con un número igual o mayor a diez carreras, tendríamos un campeón legítimo», señaló Daniel Ricciardo (Renault), que con esa frase promovió un juego y especulaciones: Lewis Hamilton hubiera ganado dos de los últimos cinco títulos que conquistó (2015 y 2019), si se contabilizaran los diez GP’s de inicio de año; Sebastian Vettel tendría dos más (2017 y 2018) y Nico Rosberg hubiera festejado en 2014. Entre los retos de 2020 asoman el comienzo en escenarios distintos a los de una temporada regular, que los equipos logren una rápida fiabilidad del auto y la capacidad del piloto para reducir el margen de error, porque las oportunidades de recuperación podrían ser un bien escaso.
La formación con la rodilla en tierra
El movimiento Black Lives Matter que abrazó Hamilton , un activista que participó de las marchas en Londres contra el racismo y a favor de la diversidad, agitó a la Fórmula 1. El británico fue crítico ante la falta de pronunciamiento del Gran Circo por el asesinato del ciudadano afroamericano George Floyd a manos de un agente blanco de la policía, un hecho que causó una revuelta mundial. Los pilotos analizarán hoy, tras la reunión con la agrupación de pilotos (Grand Prix Drivers Association), si formarán con la rodilla en la tierra, antes de la carrera del domingo. «Podemos usar la audiencia de la F.1 para enviar un mensaje al mundo, para educar a las personas. Y es bueno que la F.1 finalmente sea más proactiva en esta área. Pasé mucho tiempo conversando con Mercedes para que me siguieran. Veremos que hacemos los pilotos el domingo, pero lo importante será hacerlo juntos y no transmitir un mensaje un día y después olvidarlo: deber ser algo colectivo y a lo largo del tiempo», señaló Hamilton, que encontró apoyó en los jóvenes Lando Norris (McLaren), Charles Leclerc (Ferrari), Carlos Sainz (McLaren), George Russell y Nicholas Latifi (ambos de Williams).
Mercedes cambió el tradicional color plata de sus autos por el negro , una decisión que acompañará durante todo el calendario y en el Halo llevarán el mensaje «End Racism» y los colores de la diversidad en los espejos ; los buzos de Hamilton y de Bottas serán negros, al igual que los cascos. McLaren tendrá los colores de la diversidad en el Halo, Red Point en la trompa y el Safety Car también lo lucirá en las puertas.
Rumbo al semáforo
Para el Gran Premio de Austria, Mercedes, el equipo que más veces giró en la pretemporada en Montmeló, en febrero, presentará actualizaciones técnicas y mejoras en el motor, ese que le provocó algunas muecas de disgusto en los test. Hamilton asoma como el favorito en el Campeonato de Pilotos y el británico, en lo que podría ser una temporada corta, sólo dos veces se impuso en la carrera de apertura: en 2008 y 2015, en Melbourne. En las dos oportunidades terminó llevándose la corona. En Spielberg se impuso una vez, en 2016; el escenario es la casa de Red Bull Racing y así lo hizo sentir Max Verstappen, ganador en 2018 y 2019. «No es una experiencia normal, son muchas carreras comprimidas en poco tiempo. Verstappen progresa cada año y será un oponente fuerte, todo un desafío para Mercedes», relató el británico, al que lo separan siete triunfos del record de 91 éxitos que impuso Michael Schumacher, durante la conferencia de prensa a la que asistieron los 20 pilotos de la grilla.
En el receso, Ferrari provocó un quiebre al contratar a Sainz (McLaren) para la temporada 2021 y liberar a Sebastian Vettel. El alemán, que hoy cumple 33 años, no ocultó su fastidio y advirtió que la Scuderia no le hizo ningún ofrecimiento para continuar en el equipo. Sin butaca asegurada para el próximo calendario, admitió que podría ponerle fin al ciclo en la F.1. «Estoy motivado y quiero lograr más, pero para conseguirlo necesito el paquete y la gente correcta a mi alrededor. Si no aparece la oportunidad correcta, probablemente tendré que buscar otra cosa que hacer», relató el tetracampeón con Red Bull, entre 2010 y 2013. En Ferrari, que está a nueve GP’s de los 1000 en la F.1, el monegasco Charles Leclerc es el piloto estrella.
La última temporada sin tope de presupuesto y para el sistema DAS (Dirección de Rotación Dual), con el que Mercedes sorprendió en Barcelona; el estreno de Latifi en el Gran Circo con Williams; el retorno de Esteban Ocon, al mando de Renault, y el fantasma de Fernando Alonso sobrevolando para volver en 2021 con la escudería francesa y hasta con Aston Martin, detalles de un año atípico que empezará a desandar la F.1.