Pretenden despojar al Fonatur
CANCÚN
Por Redacción > Quequi
Más allá de sus labores como empresa enfocada a la recolección de sargazo, donde no dio los resultados esperados, Grupo Arco buscaría apoderarse de manera fraudulenta de un predio de casi mil 500 metros cuadrados ubicado en el primer cuadro de Cancún, el cual es propiedad del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur).
Ante esta situación, el organismo ha iniciado las acciones legales tendientes a recuperar el predio cuyo valor comercial ronda los 15 millones de pesos, luego de que el caso llegara a oídos del Presidente Andrés Manuel López Obrador, por lo que el director general del Fonatur, Rogelio Jiménez Pons, dio instrucciones precisas de recuperarlo como se hiciera con el predio de Playa Delfines.
Una investigación realizada por este medio, dejo al descubierto la operación realizada por Grupo Arco para apoderarse del predio ubicado en la confluencia de las avenidas Labná con Yaxchilán, a través de la empresa Rentas Ejecutivas SA de CV, utilizando la posesión del mismo como arma contra el Fonatur ante las instancias judiciales, dejando de lado que en un predio federal no se pueden crear derechos.
El coordinador regional de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), James Tobin, indicó que el valor comercial del predio arrancaría en 15 millones de pesos, considerando que el costo del metro cuadrado ronda los 10 mil pesos, cuyo monto se elevaría dependiendo del uso de suelo que tenga, además de su ubicación cerca de importantes zonas comerciales.
Lo anterior habría despertado el interés del Grupo Arco para apropiarse del lugar, que ha sido utilizado para guardar su maquinaria y lanchas de trabjo bajo el argumento de que se lo rentaron o prestaron, lo cual le habría permitido el usufructo del lugar durante varios años, en los cuales debió cubrir una renta anual de 1.2 millones de pesos, considerando un valor mensual estimado de 100 mil pesos por su ubicación.
La situación habría causado un perjuicio millonario a las arcas federales, que llevo al Fonatur a interponer en abril de 2019, una demanda penal por despojo contra quien resulte responsable ante la Fiscalía General de la República (FGR), la cual derivó en una carpeta de investigación en mayo del mismo año.
En este marco, salió a relucir que la posesión del predio data del año 2000, cuando el Fonatur apalabró con la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) la posible donación del predio de mil 470 metros cuadrados, ubicado en el lote 5, manzana 1, supermanzana 21, pero sin concretarla por lo que el predio sigue siendo parte de su inventario y de Nacional Financiera (Nafin), según consta en el Registro Público de la Propiedad y el Comercio (RPPC).
No obstante, la empresa posesionaria se dio a la tarea de cercar el lugar e incluso tramitó ante la Comisión Federal de Electricidad (CFE) el suministro de energía eléctrica, pese a no contar con una escritura pública que avale la propiedad, como establecen los lineamientos de la paraestatal.
Posteriormente, en junio de 2006 la empresa se acercó al Fonatur para enviarle un oficio de interés de compra del predio, momento en el cual el organismo “se entera” de la situación, que a la postre daría pie a que interpusiera una denuncia penal por despojo contra quien resulte responsable.
Ello, luego de que en 2018 el Fonatur recibiera la oferta de compra del predio de un tercer interesado, lo cual llevó a la Dirección de Comercialización a realizar el levantamiento del mismo con sus medidas y colindancias, encontrándolo cercado y ocupado.
Cuestionado al respecto, el subdirector de políticas estratégicas y vinculación interinstitucional del Fonatur y administrador del organismo en Quintana Roo, Raúl Bermúdez Arreola, reconoció el conflicto legal generado por la posesión del predio, que dio pie a una denuncia penal ante la FGR, pero sin dar más detalles por tratarse de una demanda legal en curso.
Sin embargo, dejó en claro que la Ley de Bienes Nacionales señala que los bienes propiedad de la Nación y de la administración pública federal son inalienables e imprescriptibles, por lo que la posesión continúa y pacífica que habría realizado el grupo, no les da la oportunidad de quedarse con el predio, por lo que el Fonatur agotará todas las instancias legales para recuperarlo.
