Sobre rieles el desarrollo del sureste
CANCÚN
Por Blanca Silva > Quequi
En el marco del programa para reivindicar al sureste del país, el presidente Andrés Manuel López Obrador, dio el banderazo de arranque del Tramo 4 del Tren Maya, que abarca 260 kilómetros que correrán de Izamal a Cancún y se complementarán con dos nuevos carriles de la autopista Mérida-Cancún, lo cual implica una inversión de 27 mil millones de pesos y la generación de 15 mil empleos directos.
Durante la ceremonia realizada en la autopista Mérida-Cancún, detalló que el tramo Izamal-Cancún será de doble vía y combinará los servicios de carga con el traslado de habitantes de la región y un tren turístico, que aprovechará la afluencia de turistas que llegan a Cancún y conozcan el sureste del país más allá de la belleza del Caribe y el Golfo, pues la zona cuenta con una gran riqueza cultural, como las zonas arqueológicas de Edzna, Chichén Itzá, Cobá, Tulum y Calakmul.
Acompañado del gobernador Carlos Joaquín, y los presidentes municipales de Benito Juárez y Lázaro Cárdenas, Mara Lezama y Nirvardo Mena, respectivamente, explicó que el proyecto busca generar un desarrollo más equilibrado para el país, para lo cual los cinco tramos que inician generarán 80 mil empleos directos, mientras que en 2021 cuando la obra esté a toda su capacidad el cálculo es de 150 mil, que ayudarán también a solventar la crisis económica por el Covid-19.
Para ello, informó que a la fecha hay firmados cuatro contratos por cuatro tramos de Palenque a Cancún, a los que se sumará este mes la licitación del de Cancún a Tulum, dentro de lo cual el cuarto tramo fue adjudicado a ICA que tiene la concesión de la vía, que deberá entregar la obra en 28 meses de acuerdo a lo pactado, sin el pretexto de que las lluvias no los dejaron trabajar.
En este tenor, comentó que en otros lugares empresas irresponsables han llevado a la cárcel a presidentes por corrupción, lo cual no sucederá con esta obra, que no requiere de tanta supervisión sino de actuar de manera responsable y tener palabra, por lo que esta labor estará a cargo de la empresa del empresario Daniel Chávez Morán, del Grupo Vidanta, el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), y las Secretarias Federales de Turismo (Sectur) y de Comunicaciones y Transportes (SCT).
De esta manera, dejó claro que se trata de una nueva etapa para el país, en la cual se seguirá impulsando al resto de las regiones pero atendiendo al Sureste, donde en los últimos 40 años sólo creció Cancún a tasas de hasta 10% anual impulsado por el sector de la construcción, seguido de la Riviera Maya, lo cual atrajo a la población de otros estados, que en vez de crecer retrocedían.
Por su parte, el director del Fonatur, Rogelio Jiménez Pons, recordó que ONU-Hábitat considera que el proyecto impulsará un crecimiento del económico de 1.6% y permitirá que más de un millón de personas salgan de la pobreza, además de saldar una deuda histórica con el Sureste, cuyas comunidades enfrentan una terrible marginación y no tienen calidad de vida.
Asimismo, destacó que el proyecto saldará también una deuda ambiental, para lo cual propone un modelo más responsable con la naturaleza, que tendrá una influencia determinante en el ordenamiento territorial, además de que en el caso del tramo cuatro la obra incluye dos carriles para el transporte y mejorar el sistema de carpeta asfáltico.
De acuerdo al proyecto presentado por la directora general de ICA, Guadalupe Phillips Margain, el Tren Maya cambiará la cara de la región, pues incluye 520 kilómetros de vía férrea y 224 kilómetros de carretera de cuatro carriles con las especificaciones más modernas determinadas por la SCT, complementadas con seis entronques y 40 pasos peatonales y de fauna, que permitirán la movilidad de la zona.
Abundó que el proyecto permitirá que convivan dos vías de comunicación: la carretera y la férrea, como sucede en muchos países desarrollados del mundo, entre los que destacan China, España y Francia, donde se observa ese tipo de movilidad, además de que “la ingeniería está enfocada en la protección del medio ambiente para crear un proyecto seguro, moderno y que tenga una gran vida útil”.
Puntualizó que la infraestructura y desarrollo del proyecto será gran detonador del crecimiento económico, lo cual será muy positivo para la zona y permitirá detonar el crecimiento económico y el empleo en la Península de Yucatán y el Sureste del país, no sólo durante la obra sino también una vez que entre en operación, debido a su impacto en el sector turístico, que representa el 13% del empleo formal y hasta el 17% del Producto Interno Bruto (PIB), por lo cual será un gran componente del crecimiento económico.