La cápsula Dragon Endeavour de SpaceX se acopla a la Estación Espacial Internacional
Florida, EU
Los astronautas de la NASA, Robert Behnken y Douglas Hurley, abrieron un “nuevo capítulo en la exploración espacial” al llegar a la Estación Espacial Internacional (EEI) a bordo de una cápsula de la compañía aerospacial SpaceX, en el que fue el primer vuelo comercial tripulado con humanos al laboratorio en la órbita terrestre.
“Aquí Houston, Bob y Doug, bienvenidos a la EEI”, fueron las primeras palabras que escucharon los dos astronautas tras atracar con éxito en el módulo Harmony.
La nave que llegó unos 10 minutos antes de la hora prevista y completó la maniobra final de aproximación a las 10:17 hora local (9:17 de la Ciudad de México) a la altura de la frontera norte de China con Mongolia, tras haber despegado acoplada a la punta al cohete Falcon 9 de SpaceX desde el Centro Espacial Kennedy ante millones de personas que siguieron la retransmisión en directo a través de internet.
La nave de la compañía estadounidense es la primera en llegar a la órbita terrestre desde Estados Unidos, después de que la agencia aeroespacial estadounidense cancelara su programa de transbordadores en 2011, lo que obligó a la NASA a enviar a sus astronautas al espacio mediante la nave rusa Soyuz durante casi una década.
“Es un momento increíble para estar en la NASA. Nuevos vehículos que volarán, continuarán con las misiones en la órbita baja, y después a la Luna y a Marte. Gracias y enhorabuena”, dijo Behnken a su llegada a la EEI.
Diecinueve horas después de despegar desde Cabo Cañaveral (Florida) acoplados a la punta del cohete Falcon 9, ante la atenta mirada del presidente estadounidense, Donald Trump, la cápsula bautizada como “Dragon Endevour” fue recibida por la tripulación de la EEI.
“La tripulación de la expedición 63 da la bienvenida al Dragon Endevour y a la tripulación del programa comercial a entrar a bordo de la EEI”, señaló el astronauta estadounidense de la NASA Christopher Cassidy, que, junto a los comonautas rusos Anatoly Ivanishin y Ivan Vagner, llegó a bordo del Soyuz el pasado 9 de abril.
Tanto el despegue como el atraque se realizaron sin problemas completando la primera parte de la misión Demo-2 que concluirá una vez que Behnken y Hurley retornen a la Tierra sanos y salvos tras certificar la funcionalidad del cohete, el transbordador y los sistemas de navegación.
Aun así, el comienzo de la misión no estuvo exenta de emoción, ya que las condiciones climáticas obligaron a posponer la misión el miércoles pasado y mantuvieron en vilo a millones de personas por varios minutos este sábado antes del despegue.
Y, una vez ya acoplados a la EEI, desde la Tierra se avisó a los astronautas de que una cremallera mal cerrada en el traje de Behnken hizo que se encendieran las alarmas de los ingenieros de SpaceX.
Afortunadamente, el astronauta hizo las comprobaciones pertinentes y el problema no pasó a mayores al comenzar con la despresurización de la cápsula.
Aproximadamente dos horas después de que la “Dragon Endevour” atracara en el laboratorio espacial los astronautas finalmente abrieron la escotilla a las 17:02 GMT, cerrando así la primera etapa de esta histórica misión, en la que por primera vez una nave de una empresa privada se acoplaba a la EEI.
Con información de EFE y López-Dóriga Digital