Clausuran cenote por no respetar la cuarentena.

TULUM 

En respuesta a dos reportes de ciudadanos que revelaban la realización de fiestas con aglomeración de extranjeros y nacionales, autoridades de Protección Civil, Salud Municipal y Policía Quintana Roo, implementaron un operativo la tarde y noche del sábado y procedieron a la clausura de un rancho abandonado que cuenta con un cenote y desalojaron a más de 45 argentinos, y en un centro de hospedaje cerca de Sian Ka’an a cuando menos una veintena de parroquianos como parte de las acciones para evitar la propagación del Covid-19. 

De acuerdo con lo anterior, Protección Civil, clausuró un rancho abandonado con cenote, ubicado en la vera de la vía estatal Tulum-Cobá, pues por la tarde solo fue llamado de atención y se había desalojado a casi 30 argentinos, pero horas después llevaron a más gauchos, quienes fueron sacados y el lugar fue clausurado por no acatar la cuarentena por coronavirus. 

Con apoyo de la Policía Quintana Roo, Protección Civil clausuró el rancho abandonado ubicado en el kilómetro 6 de la carretera estatal Tulum-Cobá, además que el operativo lo encabezó el director general de Seguridad Pública al mando de tres unidades, quienes ingresaron a dicho cenote en donde se encontraban de fiesta estas personas en su mayoría de nacionalidad argentina. 

Y es que para evitar la propagación del Covid-19, el Gobierno Municipal implementó este operativo, luego que se recibió un reporte de vecinos; ahí el alto mando en Tulum, pudo observar que, en efecto, dicho negocio no estaba cumpliendo las disposiciones oficiales, pues ahí se embriagaban más de 20 personas, por lo que se procedió a la clausura del mismo; se trata del hotel “Libélula”. 

En más información de la Policía, la madrugada de este domingo se reportó el intercambio de disparos de armas de fuego entre presuntos policías y delincuentes, hechos que rompieron el silencio de los primeros minutos de la madrugada y al mismo tiempo alertó a los pobladores de los límites entre el centro de la localidad y asentamiento irregular a unos 100 metros donde terminan las calles Alfa con Mercurio; no hubo detenidos. 

Por Francisco Canul 

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