Enfrenta crisis hospitalaria en Baja California
Agencia
Baja California se quedó sin la mitad de los empleados de los hospitales y sólo cuenta con respiradores para atender a pacientes graves por Covid-19 para una semana. Este es el personal y equipo con el que las autoridades hacen frente a la pandemia que en el estado alcanzó 337 contagios y 27 muertes.
El secretario de Salud en la entidad, Alonso Pérez Rico, explicó que los trabajadores fueron retirados, la mayoría, por ser parte del grupo de riesgo: por la edad o alguna enfermedad crónica, aunque otros más fueron diagnosticados con el virus.
“Básicamente 50% de nuestra fuerza laboral médica se resguardó en su casa. Estamos considerablemente reducidos entre el personal que se resguardó, el que no está disponible y el que desgraciadamente está enfermo”, reconoció el funcionario.
Aunque no dio detalles sobre la cifra, Pérez Rico confirmó que fue detectado un brote hospitalario de Covid-19 en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), por lo que esperan un reporte para conocer cuáles son los daños, mientras el departamento de Epidemiología trabaja para contener el contagio y en homologar procedimientos de protección del personal.
“Tenemos que determinar exactamente cuál es el recuento de los daños. En el momento en que empezaron a tener casos confirmados, nos notificaron los mismos trabajadores”, señaló.
Durante la transmisión en vivo que diariamente realiza, el gobernador Jaime Bonilla Valdez afirmó que no sólo hay falta de personal, sino también de equipo, pues reveló que con los respiradores que actualmente cuentan sólo se puede garantizar la atención de los pacientes graves durante una semana.
El mandatario criticó que en el estado haya empresas que fabrican equipo médico, como respiradores, que no quisieron vender al gobierno de la entidad, a pesar de que usan la mano de obra de bajacalifornianos para exportar los aparatos a otros países como Estados Unidos o incluso Europa, donde ya tenían pactada parte de la mercancía.
El jueves pasado, Bonilla Valdez ordenó la clausura de una compañía inglesa dedicada a la fabricación de respiradores, luego de que rechazara vender parte de la producción a las autoridades locales para distribuirla en los hospitales de la entidad.
“No puedo ser más accesible con la salud de los bajacalifornianos y el que quiera cooperar que ponga algo en la mesa y eso significa ayudarnos con ventiladores”, indicó.
Ayer, el gobernador y el secretario de Salud se reunieron con ingenieros y empresarios para revisar un prototipo de respiradores que fue creado por bajacalifornianos, con la intención de verificar que éstos funcionen bien y puedan ser entregados a los centros hospitalarios.
En tanto, hicieron un llamado a las universidades para que convoquen a los estudiantes de Medicina con pasantía a que regresen a los hospitales para poder hacer frente a la pandemia que aún no ha llegado a su punto máximo en el estado.