
Proponen destino final para sargazo
Por Raimon Rosado
Mediante la novedosa tecnología GAIA, que consiste en deshidratar los residuos orgánicos y de alimentos, la empresa canadiense Food Waste busca brindar una solución sustentable económica en la disposición final, desecación y reutilización de la gran cantidad de sargazo que anualmente llega de forma masiva a las costas de Quintana Roo, afirmó el promotor de dicho proyecto, Edward Gibson, quien explicó sus beneficios en busca de que las autoridades y empresarios locales, se interesen en su aplicación.
En principio, comentó que esta tecnología ha tenido un gran éxito durante casi 30 años en Europa, Japón, Estados Unidos y por supuesto Canadá, la cual dijo que consiste en un sistema capaz de calentar, triturar, deshidratar y desodorizar automáticamente los residuos orgánicos de alimentos en una cámara cerrada, en el lugar donde se generan los residuos.
Asimismo, destacó que las plantas de procesamiento de GAIA tienen la capacidad de deshidratar y esterilizar los residuos con una reducción de volumen de 85% hasta un 90%, evitando las emisiones procedentes del transporte de residuos, reduciendo la emisión de gases de efecto invernadero y lixiviados, tolerante a la contaminación/mezcla con otros residuos – pre separación mínima y por último, con la capacidad de producir subproductos utilizables, agua limpia y biomasa estéril, misma que puede utilizarse como abono o combustible, incluso paras las mismas plantas de procesamiento.
En el caso del agua generada, dijo que puede ser reutilizada para el riego en zonas de sequía, o puede ser vaciada directo al drenaje sin que represente peligro de contaminación.
Si bien esta tecnología es utilizada en la deshidratación de residuos orgánicos en aeropuertos, para evitar el riesgo sanitario en comestibles introducidos irregularmente, es posible aplicarla al procesamiento del sargazo.
En este sentido Edward Gibson explicó que la tecnología GAIA puede procesar de 20 kilogramos a 100 toneladas de la macroalga, a través de un proceso que no requiere aditivos y puede ser alimentado por electricidad, gas natural o gas L.P; el material residual después del procesamiento está mezclado con agua destilada y un compuesto para suelo seco, ambos libres de patógenos y bacterias.
Además de deshidratar y esterilizar los residuos, evita las emisiones procedentes del transporte de éstos, así como la emisión de gases de efecto invernadero y lixiviados.
Ahondó que la tecnología permite la reducción de los niveles de la Demanda Biológica de Oxígeno (DBO), los cuales son generados por los residuos orgánicos que ingresan a los sistemas sanitarios o de alcantarillado pluvial y que su uso tiene impacto positivo en los generadores “Carbon Foot Print” (huella de carbono).
La instalación, en un tiempo máximo de cuatro meses, de un equipo de procesamiento, tiene un costo estimado de dos mil dólares, siendo de 50 a 200 dólares su costo de mantenimiento operativo bimestral.
Este novedoso proyecto ha despertado interés en puntos del Caribe como la isla de protectorado francés de Guadalupe, donde padecen una problemática similar en arribo de sargazo, a la que sufre Quintana Roo, por lo que el representante de Fod Waste espera que las autoridades o empresarios del ramo hotelero principalmente, se interesen en la alternativa mencionada anteriormente.