Ayudar al boxeador, demandante tarea

Por Sixto López Casa Madrid > Quequi

Jill Diamond, quien preside desde 2006 el organismo WBC Cares, se mostró satisfecha por el trabajo que realizan para mejorar la vida de quienes en verdad lo necesitan. “Es un trabajo duro porque suceden cosas en todo el mundo, pero se siente bien ver que puedes hacer la diferencia en la vida de otras personas”.

Con la amabilidad que le caracteriza, la entrevistada explicó que actualmente apoyan a gimnasios en Alemania y Bélgica donde entrena un buen número de refugiados sirios.

“También estamos trabajando con centros de atención juvenil en México y en Estados Unidos participamos en campañas de salud mental para prevenir el suicidio entre adolescentes”, recalcó quien fuera la “Mujer del Año” del CMB en 2010.

“La situación tan complicada en el mundo actual implica nuevas acciones; en Australia contamos con el apoyo de jóvenes que participan en campañas para evitar el bullying”, abundó Diamond, cuya trayectoria en el “deporte de los puños” ha incluido ser supervisora de peleas y trabajar en la rama femenil de la Federación Norteamericana de Boxeo (NABF), una de las afiliadas al CMB.

Mencionó que debido a las recientes tragedias sobre el ring están formando un grupo de trabajo para educar a los boxeadores y a sus entrenadores “para que modifiquen sus hábitos y puedan tener una vida más saludable y duradera”.

Otro aspecto que ocupa gran parte de su tiempo es conseguir recursos para un fondo de ayuda a exboxeadores que al pasar de los años requieren mayor atención médica.

Recalcó que en estos 13 años de labor social, siempre se ha inspirado en las enseñanzas de don José Sulaimán. “Y seguramente así seguirá siendo, y más aquí en Cancún donde la última vez que fue la Convención Anual, en 2012, visitaron a los adultos mayores en la ‘Ciudad de la Alegría’. En aquella ocasión estuvieron, entre otros el expúgil Héctor ‘Macho” Camacho”.

No hay comentarios