Con la basura hasta el cuello; Laura Beristain se niega a cumplir orden del TSJ; inunda la Quinta basura.

Por Rafael Santiago

Playa del Carmen

La edil Laura Beristain Navarrete, junto con la mafia que ha conformado con su familia, asesores y regidores, quieren inundar de basura la parte turística de la ciudad, en un intento desesperado de presentarse como víctimas de un escandaloso fraude de más de 271 millones con la empresa Promotora Ambiental de la Laguna (PASA), conocido como “Basuragate”.

Por negligencia municipal, las aguas turquesas del mar están contaminadas con aguas negras o llenas de toneladas de sargazo, y ahora con sus corruptelas, la presidenta municipal morenista quiere ahogarla en basura, sin importare destruir la imagen turística forjada por años de esfuerzo de los playenses, al grado de que empresarios del Consejo Coordinador Empresarial de la Riviera Maya, desesperados por la ineptitud del Ayuntamiento, han convocado a una rueda de prensa para exigir que se termine con todo este enredo que afecta a la gallina de los huevos de oro, que es el turismo, al mostrarle una imagen degradante, como montones de bolsas pestilentes de desechos, junto a restaurantes y negocios, incluso estorbando a los visitantes en el corazón mismo de la zona turística.

Laura Beristain se ha enredado en un laberinto de fraudes y se encuentra entre la espada y la pared. Por un lado vuelve a caer en el desacato al negarse a cumplir lo que ordenó la sala Constitucional y Administrativa del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), a saber que se cancelen todos los contratos que hizo sobre la recolección, transporte y almacenamiento de residuos sólidos, pague y reinstale a la empresa “Cooperativa de Servicios y Comercios Recolectores de Desechos Sólidos y Líquidos” (Redesol ) y por el otro, ha recibido millones de pesos de PASA y ha firmado un contrato con esta empresa para lo que resta de su administración y también tiene que cumplirle.

El miércoles la empresa Redesol presentó un escrito para informar al secretario del Ayuntamiento que estaba lista para reiniciar sus labores, siempre y cuando se cumpliera lo que instruyó el TSJ, además de que se informara a los magistrados puntualmente de los acuerdos. La respuesta del Ayuntamiento fue no cumplir con nada de lo instruido, no pagar nada a Redesol, a quien desde el 9 de enero los jueces ordenaron reinstalarla y por el contrario realizar un juego político para intentar culparla y en el escándalo mediático lavar todas sus triquiñuelas, tratando de ocultar los turbios negocios en que están embarrados, de cara a la visita que realizará el presidente de la República a Quintana Roo.

AFECTACIONES

Por ahora el problema se enfoca en las áreas que el TSJ anotó en su resolución, que comprende la zona turística, la Quinta avenida y la 10, además de Playacar Fase 2 y Puerto Aventuras. La intención es que se desborde la basura y se culpe a Redesol de incumplimiento, con la intención de reinstalarla sin pagarle los meses que la han mantenido bloqueada desde el mandato de los jueces y sin haber acordado nada de la nueva concesión. La finalidad es correr a Redesol a como dé lugar, para poder cumplir los compromisos contraídos con PASA, empresa que además tiene a su cargo el basurero municipal y cobra 400 pesos más por cada tonelada de basura que se recolecta y se le tiene que entregar.

Y el cinismo es tal que, René Medrano, asesor del Ayuntamiento después de que fue destituido de la dirección jurídica por el escándalo de corrupción con la basura y la manipulación de los regidores, dijo en tono burlón que no pueden prestar el servicio porque caerían en desacato. Justamente el TSJ iba a desaparecer los poderes del Ayuntamiento precisamente porque se negaban a cumplir el acuerdo a favor de Redesol. Y hay que destacar que para que el Ayuntamiento no caiga en más enredos y caos, Medrano fue inmediatamente puesto como asesor especial de Laura Beristain, con la finalidad de que no delatara a todos los involucrados en el “Basuragate”.

EL FALLO

Hay que recordar que el resolutivo de enero de este año, “condena a la autoridad demandada (Ayuntamiento de Solidaridad), la reanudación del contrato de concesión”. Según la determinación judicial desde inicio de este año debería estar Laura Beristan pagando a Redesol por la recolección de basura. Sin embargo lo que hizo, en contra del mismo resolutivo del TSJ, fue realizar un megacontrato de asignación directa AD/061/2019, por un monto de 271 millones de pesos con la empresa Promotora Ambiental de la Laguna (PASA) y otras que bien pueden ser prestanombres de las autoridades que conforman un grupo VTM del Golfo, SAPI y SOFON. Todo esto con la complicidad de Marciano Peñaloza Agama, René Medrano, el síndico Omar Hazel Sánchez Cutis, el regidor Elio Lara Morales, compañero de la hermana de la edil, Luz María, sin dejar de lado a su Juan Carlos, su hermano acusado de pederasta.

Además se tiene que cumplir con otro resolutivo de la Sala Constitucional y Administrativa, que ordena el 27 de mayo que “al cumplir la sentencia definitiva, las autoridades demandadas deben ineludiblemente actualizar el monto a pagarle a la parte actora, conforme a lo previsto… en las cláusulas del contrato de concesión a reanudar. Y tampoco esto se ha cumplido ni negociado, aunque ha trascendido que se tiene que pagar 28 millones de pesos por los nueve meses que se le ha impedido operar, es decir unos tres millones de pesos mensuales, mucho menos de lo que le paga a PASA y asociados municipales que son ocho millones de pesos mensuales por el arrendamiento de 27 vehículos, de los cuáles solamente se visualizan siete y el Ayuntamiento pone trabajadores y gasolina.

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