
Disputan ‘tiburones’ botín sindical
TULUM
Francisco Canul > Quequi
El secretario general y el tesorero de los taxistas “Tiburones del Caribe de Tulum”, Irán Zapata Hipólito y Carlos Alvallero Pantoja, respectivamente, se enfrascan en una amarga lucha de poder por el control del sindicato, pues los más de seis millones anuales que se generan por concepto de pago de cuotas a través de los operadores, venta de concesiones, renta de placas, cobros por emplacar» un taxi y demás ingresos convierten al gremio en un potencial económico donde hoy colisionan intereses mezquinos.
Ayer, los «Alvalleros» tomaron por varias horas el sindicato y los “Iranes’ realizaron una manifestación a través de una caravana de unidades, exigiendo la intervención de las autoridades.
El grupo liderado por el ahora extesorero Juan Alvallero Pantoja, exige cuentas claras, quieren saber cuál es el destino real que tiene una fracción del predio que se adquirió para la construcción del nuevo sindicato, mientras que socios y seguidores de Irán Zapata demandan transparencia en las finanzas, el destino que se le ha dado en los últimos seis meses, en qué se invertido y ejercido, así como la devolución de 25 placas que fueron entregadas a personas ajenas al sindicato y que nunca han estado en el padrón de escalafón.
Por la fuerte disputa tras el poder sindical, Alvallero Pantoja, quien el domingo pasado fue destituido en asamblea de socios, y Zapata Hipólito, aún secretario general del gremio taxista “Tiburones del Caribe”, han sumido al sindicato en crisis e inestabilidad, y de acuerdo con los hechos ocurrido ayer, según socios que no están a favor ni en contra de los hoy par de protagonistas, “el sindicato ya es botín en disputa, pues tanto Irán Zapata como «Mama Lucha» crearon y tienen sus propios grupos que los siguen y apoyan”.
Y es que ayer, al interior de uno de los llamados sindicatos taxistas más conflictivos del estado, «Tiburones del Caribe de Tulum», por supuesto se ha recrudecido, y el problema día a día se empeora tras los acuerdos tomados el pasado domingo por las asambleístas, que fue la destitución de dos directivos y la expulsión de cuatro «martillos».
PODRÍA «REVENTAR»
La fuerte disputa y el riesgo de que de nueva cuenta «reviente» un zafarrancho entre ambos grupos se puso de manifiesto, tan es así que Daniel Hernández Gutiérrez, director general de Seguridad Pública y Tránsito Municipal informó que el fuerte operativo policial es para salvaguardar el orden, nada más.
El riesgo de un nuevo zafarrancho entre taxistas sigue latente, ya que policías municipales y estatales sitiaron la sede sindical, luego que un grupo de socios y «martillos» tomó las instalaciones del edificio sindical, mientras que, por otro lado, otro grupo de concesionarios realizaron una marcha, rechazando esos desmanes y exigen la pronta intervención del Gobierno del Estado para que se ponga fin al conflicto.
Alrededor de las 10 de la mañana, seguidores de Carlos Alvallero Pantoja tomaron las instalaciones del edificio sindical y no dejaron pasar a ningún directivo; por otro lado, decenas de concesionarios seguidores de Irán Zapata Hipólito, a través de una caravana de taxis realizaron una manifestación pacífica por toda la avenida principal, arrancando desde el crucero de la Zona Arqueológica.
De parte del grupo de Irán Zapata el llamado a los socios fue para no caer en provocaciones, y que esta manifestación pacífica desde sus unidades sea para que el Gobierno intervenga y se ponga solución a este conflicto que se traen el ahora extesorero y el secretario general.
Previo a lo anterior, desde la mañana un grupo cercano a los 100 trabajadores del volante, entre socios concesionarios y «martillos» tomaron el edificio del sindicato “Tiburones del Caribe, como medida de presión para alcanzar las exigencias del tesorero destituido el pasado domingo en asamblea.