Son víctimas de la violencia
Por Raimon Rosado
Dentro del entorno de violencia en el que en gran medida coexiste la sociedad cancunense, los jóvenes constituyen uno de los sectores más vulnerables a padecerla y ejercerla, lo que se refleja en el hecho de que siete de cada 10 estudiantes, perciben o sufren situaciones de violencia en sus escuelas, mientras que un 10% de las adolescentes que se embarazan prematuramente, manifiestan que han sido violentadas o presionadas por sus parejas para sostener relaciones sexuales, que en un 90% de los casos, ellas no deciden sobre el uso de métodos anticonceptivos, señaló la directora del Centro Integral de Atención para la Mujer (CIAM) Cancún, Paola Olvera Feregrino, quien impartió ante alumnos universitarios, la conferencia “Cultura de Paz”.
La activista de esta organización a favor de salvaguardar los derechos de las mujeres, indicó que mediante la charla que por más de una hora impartió a los alumnos pertenecientes a la Universidad del Sur, se busca abrir espacios desde donde pueda darse la pauta para recomponer nuestro tejido social, mediante una cultura tendiente a fomentar la paz, en un entorno como el nuestro, donde las mujeres y los jóvenes son los más vulnerables.
Destacó que la gran mayoría de la población ve con mucha normalidad las acciones para ejercer violencia, lo que deriva en que sea común la recurrencia en episodios de conflictos escolares entre niños y jóvenes; señaló que con base en un estudio realizado por el CIAM en cuatro escuelas de niveles primaria y secundaria, de la Región 103, el 70 % de los estudiantes percibe cotidianamente este tipo de situaciones, ya sea entre sus compañeros, o sobre ellos, al ser altamente común la existencia de estudiantes que sufren como quienes reproducen la violencia.
Derivado de dicha problemática, señaló que de igual manera, el CIAM trabaja en promover el empoderamiento de las adolescentes para que ellas mismas aprendan a prevenir los embarazos prematuros, dentro de lo que en gran medida está implícita la violencia por parte de los varones, al presionarlas a sostener relaciones sexuales, lo que es reconocido hasta en un 10% de las jovencitas embarazadas, sumado a que la mayoría afirma que su primer relación sexual fue con hombres mayores que ellas, lo que evidencia el ejercicio de poder sobre ellas, lo que en el 90% de los embarazos, la joven no tuvo poder de decisión sobre el uso de anticonceptivos, por lo que de poco sirve repartir preservativos si al final, por dicha determinación, no logran cumplir su cometido.
