
Sears, a un paso de la bancarrota
Por Agencias > Quequi
La cadena de tiendas departamentales Sears planea declararse en bancarrota en los próximos días, debido a que enfrenta un vencimiento de deuda por 134 millones de dólares, de acuerdo con varios informes de prensa difundidos este miércoles.
Sears, que fuera por algunos años la cadena de tiendas minoristas más grande del mundo, no ha logrado obtener ganancias desde 2010, una razón adicional por la que sus administradores han informado a varios de sus acreedores sobre su insolvencia.
Al cierre de la jornada, las acciones de la empresa cotizaron en 50 centavos de dólar, (9 pesos, aproximadamente).
Mientras en Estados Unidos la cadena Sears planea cerrar más de 60 tiendas, en México siguen las aperturas de la marca, que se encuentra dentro de Grupo Sanborns y cuyo dueño es el empresario Carlos Slim.
«NO ES RENTABLE»
La empresa, propiedad del administrador de fondos de inversión Eddie Lampert, está afinando los detalles para la declaración de quiebra, que podría suceder este fin de semana, de acuerdo con el diario «The Wall Street Journal».
Asegura que la situación es tan mala que el propio Lampert ha usado su propio dinero durante años para evitar que Sears colapse debido a la poca afluencia de clientes y a la rápida caída en las ventas.
Esto ya se veía venir, pues la empresa ya ha cerrado cientos de tiendas que pierden dinero diariamente y prometió cerrar 150 establecimientos más este año. Las acciones de la compañía se cotizan en alrededor de 59 centavos y han bajado más del 90% de su valor en los últimos 12 meses.
Lampert ha usado su propio dinero durante años para evitar que Sears colapse debido a la poca afluencia de clientes y a la rápida caída en las ventas.
La empresa ha cerrado cientos de tiendas que pierden dinero y prometió cerrar 150 establecimientos más este año. Las acciones de la compañía se cotizan en alrededor de 59 centavos y han bajado más del 90% de su valor en los últimos 12 meses.
El minorista de 125 años de antigüedad, con sede en Hoffman Estates, Illinois, ha confiado en tratos y fusiones por parte del administrador del fondo de cobertura para compensar miles de millones de dólares en pérdidas. Ha cerrado cientos de tiendas que pierden dinero y prometió cerrar 150 más este año.
El destino de las compañías satelitales, como Sears Hometown Stores y la marca de electrodomésticos Kenmore, sigue en el aire. Lambert ha propuesto una venta de Kenmore a ESL Investments.
Sears está trabajando con Wachtell Lipton Rosen & Katz como asesor y con Lazard como banquero de inversiones, según personas familiarizadas con el tema que no estaban autorizadas a hablar en público.
Las acciones de Seritage Growth Properties, el fideicomiso de inversión en bienes raíces que cuenta con Sears como su mayor inquilino, cayeron hasta un 10%, luego de los informes sobre la posible declaración de quiebra de Sears.
El plan de reestructuración de Lampert recibió poco o ningún apoyo de otros acreedores, quienes lo vieron como una maniobra para que se pague a ESL por los bienes raíces de Sears, según una persona con conocimiento directo que solicitó no ser identificada.
«Existe la posibilidad de que esto se vuelva feo, particularmente con todos los préstamos directos de ESL y las pérdidas incurridas por empresas como ‘Fairholme'», dijo Noel Hebert, quien cubre a Sears para «Bloomberg Intelligence».
«Si me pongo en el lugar de la junta directiva, permitir que la compañía venda lo poco de valor que le queda a su mayor accionista para un indulto a corto plazo no se refleja demasiado bien en mí».
Comenzando como una compañía de relojes de Minneapolis en 1886, Sears saltó a la fama y la fortuna como un negocio de pedidos por correo a fines del siglo XIX. Como Sears, Roebuck & Company, la compañía vendió un “violín modelo Stradivarius” por 6.10 dólares y una lámpara de banquete de bronce de ocho dólares por 2.30 dólares. A fines de la década de 1920, una nueva tienda de Sears abrió en promedio uno de cada dos días hábiles.
La historia reciente está más marcada a medida que Sears lidió con la popularidad fluctuante de los centros comerciales y la facilidad de las compras en línea. Lampert, de 56 años, ayudó a diseñar una fusión con Kmart en 2005 y en 2013 se convirtió en el presidente y director ejecutivo de la compañía.