Unión Q. Roo-Yucatán
Toluca, Estado de México
Las Secretarías de Turismo de Quintana Roo y Yucatán trabajan en un proyecto para impulsar el turismo de circuito en las zonas sur de ambos estados, además de Valladolid y el centro de la entidad, que entraría en operación hacia 2018, una vez que sea probado y comprobado para su comercialización, principalmente en el mercado europeo.
De acuerdo con el secretario de Turismo de Yucatán, Saúl Ancona Salazar, el recorrido va de la mano con la apertura de la zona arqueológica de Ichkabal e incluiría lugares como Chetumal, Bacalar, Peto, Uxmal, Chichén Itzá, Punta Laguna, el Cuyo, Holbox, Valladolid y Felipe Carrillo Puerto, estos últimos con el tema de la Guerra de Castas.
Entrevistado al concluir su participación en el panel “Tecnología y turismo, los pros y contras” del caso de luz y sonido durante el Sexto Foro Nacional de Turismo y Cultura Kultur 2017, detalló que el objetivo es acrecentar la afluencia de turismo internacional a Yucatán, que de 2012 a la fecha pasó de 18% a 30% con un índice de crecimiento anual de 7.1%, mientras que el nacional bajó de 82% a 70%, siendo los segmentos de bodas, vacaciones y congresos y convenciones los más importantes para la entidad.
Ante este panorama, el gobierno de Yucatán trabaja también en un programa de acción para la zona arqueológica de Chichén Itzá, que estará listo en los próximos meses, dentro de lo cual se busca que el turista que acude a visitar el lugar por la mañana realice un sólo pago como sucede en la noche, como lo han solicitado las agencias que los mueven.
Previamente durante el panel, los secretarios de Turismo de Yucatán y Campeche, Saúl Ancona Salazar y Jorge Manos Esparragoza, respectivamente, así como el subsecretario de Puebla, Irving Mayel, coincidieron en la importancia de cobrar por el acceso a las zonas arqueológicas para cubrir los gastos de mantenimiento de la infraestructura y equipamiento que requieren para su operación.
Lo anterior, puntualizaron, les permite ser autosustentables y evitar que se conviertan en elefantes blancos, sobre todo en el caso de los que se ubican cerca del mar por el daño que el salitre ocasiona en las estructuras, lo cual se traduce en una mayor derrama económica y mejor ocupación para los destinos donde se ubican.
Por Blanca Silva/Enviada Especia
